Thursday, July 13, 2006
LA TEORÍA DE LA INVOLUCIÓN
Los psicólogos que han visto en nuestro alejamiento de la naturaleza una etapa de un tal “proceso evolutivo”, dicen que “el pensar racional” es dar un paso sobre la animalidad, que la técnica es “evolución” y que el “humano” está en la cumbre de la civilización. ¿Negativo o positivo? En algunas religiones y mitos, el “humano” supuestamente “cayó” por haber desobedecido a su “creador”. Vive en plena Caída, por ello se alejó de la naturaleza y de su PARADISIACA ANIMALIDAD, pues justamente, según la teoría de la “evolución”, en el pasado éramos simios, unos primates, ANIMALES, en armonía con la Madre Naturaleza, sin aquel destripamiento de la psiquis por la racionalidad exacerbada, el exceso de testosterona y su patológico “pensar racional”. Sabemos que hace miles de millones de años la semilla de la vida fue depositada en este planeta por “quien sabe quien”, unos afirman que fueron los “dioses del cielo”, otros dicen que fueron las fuerzas de la misma Naturaleza que creó la Vida de la Nada en un juego de posibilidades infinitas en este infinito espacio. Los que opinan que la vida fue creada por los “dioses del cielo” incitan a pensar que hubo “un comienzo” y una “creación” no solamente de la Vida, sino del universo entero. Tal insensatez está siendo denunciada por aquellos que opinan que la Vida y el Universo en el infinito espacio son ETERNOS y que no hubo una creación ni un comienzo y por lo tanto tampoco una evolución ni “dioses del cielo creadores”, sino que toda partícula que compone el universo es DIOS mismo, cada ser humano es el único DIOS, y DIOS mismo es hijo de la Madre Nada, de la Oscuridad Infinita. Pues vemos que la materia y las últimas partículas subatómicas no pueden ser medidas con exactitud, ni su velocidad ni su posición, porque su movimiento caótico flota en el vacío de la INFINITA NADA, flotan en el Útero del Vacío. Toda partícula ha venido de la misma madre-matriz del espacio vacío sin límites, todo Ser es un hijo de la Nada. Es curioso que en todas las religiones exista la imagen de la Madre de Dios sosteniendo a su Hijo-niño. Isis, Hecate, Astarte, Diana, Kali, Maat, Lilith, Tiamat, son solo algunos nombres que diferentes religiones pusieron a sus DIOSAS quienes simbolizaban esta cosmogonía en donde la Luz es un engendro de la Madre Oscuridad. La polaridad del ser y el no-ser se resolvía en la unidad, como por ejemplo en el Taoísmo y su unificación de la polaridad, donde lo dividido puede unificarse y lo unido puede dividirse, en el Yin-Yang. A partir de esta creencia apareció técnicas de Yoga en las que la sexualidad sagrada era un símbolo de la unidad de la polaridad, el hombre y la mujer representaban al Dios y a la Diosa en la cosmogonía, el coito eterno del Ser y la Nada. Así mismo, el neo-culto de brujería en occidente llamado Thelema que retoma muchos postulados del taoísmo, creado por el mago poeta más controversial del siglo XX, Aleister Crowley, en su Liber al vel Legis afirma que la Nada, simbolizada por la diosa Nuit, está dividida a causa del Amor, para la posibilidad de la Unión y que el dolor de la División no es nada comparado con el gozo de la Disolución. Es decir que el mismo Universo es un coito, como ya lo intuía el filósofo George Bataille en sus investigaciones sobre la sexualidad sagrada, el ser y la nada son el marido y mujer eternos, el Orgasmo es el éxtasis de sentir la Totalidad en la Madre Nada, el sexo es la expresión más fidedigna de la DIVINIDAD FEMENINA.
Cuando el patriarcado, a través de las religiones monoteístas como el judaísmo, el islamismo y el cristianismo, impuso una cosmogonía de la creación de un dios-padre y una moral del premio y del castigo, que reprime el sexo para controlar, manipular y censurar, se ejecutó el nefasto lavado masivo cerebral de la prohibición sexual obligado por los “dioses-padres del cielo”, todo para instaurar una sociedad decadente machista y violenta. El masculino “pensar racional” se fue apoderando de las creencias sexuales y millones de esculturas religiosas gigantescas en las que se enaltecía a las diosas y dioses del sexo fueron destruidas. La sexualidad y el placer se desacralizaron y la nueva moral de la represión usufructuó la energía humana para crear la civilización del macho-hombre, donde manda la verticalidad, la jerarquía, la autoridad, la disciplina, el militarismo, el patriotismo, el abuso de la naturaleza, la violencia y el irrespeto a los otros seres que conviven en nuestro planeta. Cuando el matriarcado y la armoniosa relación con la Madre Naturaleza fue desapareciendo por la violencia magnánima de los cultos imperialistas monoteístas, inculcados por el patriarcado, se estaba dando un paso hacia atrás, una caída, una decadencia, una Involución. La civilización patriarcal y su “pensar racional” fue diseñando durante muchos siglos este sistema tecnológico de esclavitud masiva con su industrialismo científico que destruye a la naturaleza, provocando desastres tan inhumanos como los de Hiroshima o los ensayos nucleares que afectan no solamente a la especie humana sino también a todo ser que habita en este planeta y en esta galaxia. Cuando dejamos de sentir un contacto armonioso con la Madre Naturaleza, cuando dejamos a un lado los arquetipos femeninos de cooperación e instintiva solidaridad con lo otro y con nuestro entorno, cuando el racionalismo instrumental declaró que el ser humano tiene un derecho sobre la naturaleza para explotarla a discreción, en nombre del “progreso y la evolución”, lo convirtió en un ser criminal depredador y saqueador, en un verdadero animal de rapiña, en un “buitre carroñero” que se alimenta de la muerte y de la sangre.
La destrucción de las selvas por la estúpida y enferma codicia humana de la explotación petrolera, minera y maderera, los experimentos científicos con animales insertándoles químicos que provocan mucho dolor, los criminales que negocian con las pieles de los animales, los científicos locos que manipulan el ADN para desequilibrar a la naturaleza, las nuevas técnicas de veneno atmosférico llamados “Chemtrails”…¿Cómo pueden decir que actualmente estamos en la cumbre de la “evolución” si la estupidez y la ignorancia están gobernando? ¿Cómo pueden decir que el ser humano es superior por su inteligencia si por cada ensayo nuclear y bioquímico que realizan los “inteligentes” militares y gobernantes, el universo entero queda afectado? ¿Cómo pueden decir que esta máquina de esclavitud y enajenación llamada industrialismo es producto de la evolución y el progreso? Se necesita mucha hipocresía para pensar que la civilización actual es la cumbre de la “evolución” donde millones son enajenados en una sociedad materialista y mezquina que enaltece lo más bajo y vil en el humano como es el egoísmo, la codicia, el individualismo, el materialismo. Los dirigentes de esta sociedad tapan la crisis con la propaganda masiva de los modernos medios que idiotizan a la humanidad haciendo que la ignorancia la vuelva más servil y esclava.
El darwinismo científico es producto de la decadente visión lineal del tiempo y que solamente describe a la naturaleza como en eterno devenir, más no como una “evolución”. Si cuando éramos animales vivíamos más armoniosos con la naturaleza y con el universo, cómo pueden decir que el aparecimiento del “homo sapiens” o “hombre-macho racional”, que se alejó de la madre naturaleza, es producto de la “evolución”. Este “homo sapiens” ha diseñado su propio suicidio colectivo, muchos pensadores en el transcurso de los dos últimos siglos ya denunciaron que la teoría de la evolución solo justifica el comportamiento inhumano socio-político de las sociedades capitalistas, como la ley del más fuerte y la absurda competencia económica que enriquece a unos cuantos y a la mayoría los arroja a la pobreza.
En verdad no hemos evolucionado, si se dan cuenta que hace millones de años el ser humano sentía armonía con su animalidad natural y que ahora está desesperado porque no tiene una columna en la que asentar su existencia, es la prueba más fehaciente de que hemos Involucionado. Si comparamos a las antiguas civilizaciones humanas como la de los Mayas, Sumerios, Chinos, Egipcios, Incas, Fenicios, Hindúes, con la civilización actual, vemos que ellos eran mucho más "evolucionados" y “superiores”. Lo demuestra los arqueólogos sensatos que vieron y estudiaron lo que dejaron estas civilizaciones, dejando en claro que sus modelos de vida y de cultura eran mucho más armoniosos con la naturaleza, con la Tierra y los Ciclos Cósmicos. Así mismo, su conocimiento de las fuerzas de la naturaleza les hacía aplicar técnicas de subsistencia que no destruían su entorno…la civilización actual está al borde de la hecatombe y se supone que hemos evolucionado…