Thursday, August 03, 2006

GEOPOLÍTICA DEL FIN



Si Israel decide atacar a Irán y a Siria con la ayuda de EE.UU, una reacción de China puede ser casi inmediata, pues en los suelos de Irán se encuentran los yacimientos petrolíferos que el Dragón Rojo necesita para mover su máquina imperial en los próximos 15 años. Pero también la máquina imperial de EE.UU necesita muchas reservas de energía para no colapsar, ahora están haciendo la guerra a Medio Oriente por desesperación y angustia, pues necesitan controlar los yacimientos petrolíferos en todo el mundo para estos próximos 15 años, sino el sistema norteamericano puede quebrarse y hundirse en el caos sin el petróleo que necesita para mantener a su infame sociedad del despilfarro (ver la película Mad Max). China y EE.UU necesitan el control del petróleo y la hegemonía imperial para mantener a sus imponentes y monstruosas naciones. Es la lucha de dos imperialismos, el capitalismo privado vs el capitalismo de Estado. La globalización impulsada por los países occidentales del capitalismo privado, quiere arrastrar a todo el mundo en esta lucha de los imperialismos. El Nuevo Orden Mundial apunta al control absoluto de la energía en el mundo en manos privadas, quieren “privatizar” no solamente el petróleo, sino también el agua, la biodiversidad, los minerales, los bosques, la vida humana etc. mientras que el Estado comunista de China también se “privatiza” como lo hizo la desaparecida Unión Soviética que pasó a manos de las mafias. China está globalizada porque comercia con transnacionales y está inmersa en el mercado mundial, sin embargo, no permitirá que los EE.UU invadan Irán y controlar su petróleo, porque entonces China se sometería completamente a los designios del nuevo orden capitalista-privado. Los tres millones de efectivos militares y más de 10.000 bombas atómicas de China intimidan a los EE.UU y al mundo Occidental, por ello Mahmoud Amadinejad, presidente de Irán, firmó muchos tratados petrolíferos con China para asegurarse su protección contra el “Gran Satán Imperial” de Occidente. Sin embargo, la máquina de genocidio de los EE.UU y de Israel es imparable, la invasión de EE.UU a Irak en el 2003 le dio un espaldarazo a Occidente en el dominio de los pozos petroleros de Medio Oriente. China parece que vio esta invasión como una simple provocación que mostraba el poder de EE.UU y su clara intención de hegemonía mundial imperial. No obstante, si EE.UU decide controlar los yacimientos petroleros de Irán, entonces China mirará esto como un ataque contra sus propios intereses, lo que ocasionaría el despliegue de su imponente ejército en la zona y la consecuente declaración de guerra mundial.

A estas alturas, todo puede pasar. Por ejemplo, Israel no solamente quiere hacer desaparecer a los Estados árabes, para que poco a poco anexione más territorio y así crear la Gran Israel soñada por el padre del sionismo, Teodoro Herlz, quien veía un Estado judío que vaya desde el canal de Suez hasta el río Eufrates. Actualmente, la invasión a Líbano y a Palestina es la prueba clara que una “limpieza étnica” se está realizando con terror y genocidio. Los padres de Israel están exterminando a los pueblos árabes por racismo, ignorancia, ambición y poder mundial, los pueblos del sur de Líbano están siendo desalojados con genocidio y masacres para que los enfermos soldados israelitas instalen la bandera de Israel en los lugares “étnicamente limpiados”. EE.UU e Israel están repitiendo las cruzadas medievales, su barbarie y demencia no es comparada ni por los más despiadados templarios-cruzados, ahora la nueva tecnología del exterminio manda matar a cientos de niños indefensos que no tienen nada que ver con los problemas políticos de unos cuantos psicópatas que quieren un Orden Imperial. ¿Alguien podrá detener a estos enfermos mentales en su ambición de poder mundial? Lo han venido planeando desde hace siglos y actualmente estamos en una fase decisiva de este Plan de conquista mundial. EE.UU e Israel juntos, tienen el mayor arsenal nuclear del planeta, que solo puede ser competido por el arsenal de China y Rusia.

Ahora bien, si Israel y EE.UU desean instalarse estratégicamente en Medio Oriente con violencia y masacres, puede ser que les salga el “tiro por la culata”, ya que el bestialismo de los ejércitos de EE.UU e Israel lo único que provocan es el repudio de todo el mundo. China y Rusia miran con preocupación lo que está pasando en esta candente zona del planeta, pues cuando las milicias de Hizbollah y Hamas sean debilitadas y vencidas por el monstruoso ejército de Israel, puede ser que EE.UU dé el aval para la siguiente fase que es la invasión conjunta del sionismo contra Siria e Irán. Sin embargo, vencer a las milicias árabes no es tan fácil como programan los poderosos de Israel y de EE.UU, pues ambos ejércitos se están topando con una furiosa resistencia de guerra de guerrillas que está debilitando al monstruoso coloso sionista invasor. El pueblo árabe no es de fácil conquista y las mismas cruzadas les habrán enseñado a los pueblos occidentales judeo-cristianos que una resistencia el doble de sangrienta puede ser su retribución, por lo que sus planes imperiales pueden fallar. Si piensan usar bombas nucleares tácticas contra Irán, la nube de radiación desplazada por las corrientes de viento Monzónicas, podría extenderse hasta zonas de Pakistán, India, hasta China, sería una verdadera catástrofe mundial. ¿Permitirán los chinos este demente plan de los estadounidenses e israelitas? ¿Será que los ejércitos de China y EE.UU se van a enfrentar en Medio Oriente por el control de los yacimientos de petróleo en un conflicto nuclear a gran escala? ¿Será que las bombas nucleares que la plutocracia mafiosa de Rusia vendió a grupos terroristas, serán usadas contra Occidente por venganza por la demente ofensiva de los dirigentes occidentales a Medio Oriente? A estas alturas, todo puede pasar. No sería extraño que nuevos atentados terroristas operados por los mismos gobiernos sacudan a ciudades occidentales para que den la justificación de nuevas invasiones a otros países y una cada vez más totalitaria vigilancia y control de toda la sociedad.

Lo que está ocurriendo en estos instantes en el mundo puede determinar el futuro de toda la humanidad, si se desata un conflicto nuclear, las consecuencias pueden ser realmente nefastas. Está claro que los dirigentes neo-conservadores de EE.UU quieren una guerra nuclear, y esto ha sido planeado desde que se creó el Estado de EE.UU como una de las naciones imperialistas más extremistas y religiosas. En verdad, parece que el libro del Apocalipsis de la Biblia es tomado demasiado en serio por los dirigentes conservadores de EE.UU, pues están provocando en Medio Oriente un verdadero Armagedón propio del “fin de los tiempos”. Esta enferma tradición religiosa judeo-cristiana, de la redención mesiánica y del tiempo lineal, es una de las bases del imperialismo occidental. Los EE.UU se creen elegidos por Dios para formar un Nuevo Orden de las Eras, un Imperio Mundial que domine los cuatro puntos cardinales del planeta (no es extraño que existan bases militares estadounidenses, de la ONU y de la OTAN en casi todos los países del mundo). Israel también quiere en nuevo orden mundial ya que, según sus creencias, el mesías del judaísmo vendrá como un “rey del mundo” al final de los tiempos. Parece que EE.UU está acelerando este “final de los tiempos”, su estupidez imperialista está causando un conflicto bélico sin precedentes en la historia humana, que no se dan cuenta que si provocan una hecatombe atómica no quedarán “elegidos” ( y si quedan “elegidos” pues vivirán el verdadero infierno en una tierra infectada de radiación), que no se dan cuenta que la enfermiza ambición de conquista mundial por formar un imperio es propio de humanos insensatos, infames y criminales.

Solamente un nuevo Mayo 68 mundial, que esta vez sí destruya al sistema capitalista detendrá el plan de esclavitud imperial y de exterminio humano de los dementes que dirigen esta sociedad al ABISMO…