"Cuando los objetos volantes alcanzaron la Tierra, se situaron en orbita sobre el ecuador. Era una cantidad de naves enormes, cuyas intenciones se desconocían. Se realizaron contactos por radio, gracias a la utilización de un lenguaje binario de ordenador, que permitieron al proyecto SIGMA así como a otro nuevo proyecto denominado PLATO, organizar un aterrizaje que permitió un contacto directo con estos seres de otro planeta.Se confió al proyecto PLATO el establecimiento de relaciones diplomáticas con los extranjeros del espacio. En el mismo período, otra raza de extraterrestres humanoides también había contactado con el gobierno de los Estados Unidos. Estos últimos, nos puso en aviso en contra de la raza extraterrestre que rodeaba con sus naves el Ecuador y propuso ayudarnos en nuestro desarrollo espiritual. Como condición preliminar, estos extraterrestres nos pidieron que desmanteláramos y destruyéramos nuestras armas nucleares. Se negaron a un intercambio de tecnología argumentando nuestra falta de madurez espiritual y nuestra incapacidad en manejar las tecnologías que ya disponíamos. Dijeron que sólo utilizaríamos las nuevas tecnologías para destruirnos los unos a los otros. Explicaron que estábamos en el camino de la autodestrucción, que debíamos parar de matarnos los unos a los otros, de contaminar la tierra y esquilmar sus recursos naturales, y que debíamos aprender a vivir en armonía."
Milton William Cooper
Pensar que en este Pluri-Universo somos los únicos seres con “inteligencia” es una idea muy retrógrada y caduca. Giordano Bruno, filósofo asesinado por la Iglesia Católica en el siglo XVI, decía que hay un infinito número de universos y un infinito número de mundos posibles. Tal aseveración contradecía tanto con la ideología imperante por la esclavizante religión judeo-cristiana, que la Iglesia mandó a quemar al cuerpo de Bruno pero no pudieron hacer cenizas a su pensamiento. Decir que hay un infinito número de mundos anula la idea de que somos los únicos seres en este Pluri-Universo, anula también la idea de que hubo un dios-creador, puesto que en un número infinito de mundos no puede haber un comienzo y un final. El pensamiento de Bruno ya coincidía con la creencia de que no somos los únicos seres en este infinito Pluri-Universo y, de hecho, comprueba que existen civilizaciones en otras galaxias y en otros Espacio-Tiempos. El planeta Tierra no sería más que uno de los lugares habitados por seres “inteligentes”, mientras que en otras dimensiones también hay otras “inteligencias” y “civilizaciones” que habitan en el infinito número de mundos.
La humanidad es una especie animal muy joven en la historia de este planeta, es evidente que antes de la era humana ya existían seres de otras galaxias que habitaron en este punto perdido en el infinito. Hasta es muy posible que la humanidad misma sea un “experimento” de “inteligencias” de otras galaxias, ya que el ADN de nuestros genes es la prueba fehaciente de que el ser humano es la medida de todas las cosas, un modelo miniatura del cosmos, un microcosmos.
En todos los mitos de los pueblos humanos se han hablado de “luces del cielo” y de seres visitantes que han venido a este planeta con la intención de guiar a los humanos, las religiones los llamaron “ángeles”, "demonios", “devas” o “asuras”. En otros mitos se habla de que existe una “guerra de los dioses”(como en el Bagavad-gita) y que la humanidad nació en medio de una contienda universal que ya tendría milenios de existencia. Otros mitos dicen que los “seres del cielo” trajeron la Vida con el código del ADN para crear a la humanidad como un experimento de guerra en esta contienda de los dioses. Mitología o no, sabemos que existen seres en otras dimensiones, en otros planetas y en otras galaxias. El inconciente colectivo ha creado “símbolos”, “mitos” y “cuentos” que prueban que desde los albores de la humanidad ya se tenía la conciencia de la existencia de seres de otros mundos. En verdad, nunca estuvimos solos en este Pluri-Universo, siempre estuvimos siendo observados y guiados desde las primeras civilizaciones y siempre lo supimos, ya que estaba en nuestro inconciente.
Se ha hecho un profundo daño a nuestra psiquis colectiva el querer borrar de nuestra mente el hecho real de que existen seres extraterrestres o de otros mundos. Las religiones y la falaz y escéptica ciencia positiva han hecho un tremendo lavado masivo cerebral-mental con aquella “creencia” antropocéntrica de que el ser humano es el único ser vivo en este Espacio-Tiempo y creado por un Dios único. La negación de la realidad es producto de la esclavitud mental propagada por estas religiones y falsas ciencias, quienes tienen la clara intención de arruinar la mente humana y hacerle ciego y esclavo. En verdad, esta manipulación es ejercida por unos “seres extraterrestres” que desean la ruina de la humanidad y la conquista total de este planeta y de esta zona de la galaxia.
La gran manipulación se ha venido ejerciendo desde que la humanidad tuvo conciencia de su puesto en el Cosmos, de que todos los seres existentes en este Pluri-Universo vienen de un mismo lugar y vuelven al mismo (la madre-nada). Las primeras religiones monoteístas anularon la creencia de que el ser humano es un "dios" entre “varios dioses” y de que hay seres de otros mundos. El judaísmo, el Islam y el cristianismo fueron herramientas de manipulación para alejarle al ser humano de su verdadera raíz. El Dios patriarcal fue un invento de “seres extraterrestres” para manipular a la humanidad con el interés de esclavizarla. En esta contienda mítica de los “dioses” extraterrestres, hemos llegado a un punto crucial, pues solamente desde hace 6000 años hay esta nefasta creencia de la existencia en un solo Dios, hoy en día los paradigmas están cambiando vertiginósamente. Estos seres que inventaron esta funesta idea quieren hacer que el ser humano se convierta en esclavo de su único Dios, en herramienta manipulable, en un ser servil y pusilánime. El Dios patriarcal es autoritario y castigador y ha causado tantas tragedias en la historia humana (hasta ahora) que es tan absurdo no darse cuenta que el mayor de todos los males y lo más inhumano es la creencia en un tal “Ser Superior” o “Gran Elaborador del Universo”.
Somos piezas claves de un cósmico ajedrez en donde fuerzas cósmicas están en constante lucha y oposición. Seres extraterrestres se encuentran en una guerra universal por el control de esta galaxia. El sistema solar es cómo una zona de guerra y el planeta Tierra es el campo de batalla. Los seres humanos son protegidos de esta Tierra y por ello deben defenderla con toda su vida, pues en este instante hay alienígenas que quieren destruir a la humanidad y a la Tierra con su modelo insano de civilización. Los mismos “seres extraterrestres” que impusieron la creencia en un solo Dios se encuentran hoy en día a punto de formar un Imperio en el mundo para esclavizar totalmente al ser humano, para después exterminarle en campos de concentración y en un holocausto nuclear. La Biblia es un cuento escrito por estos “seres extraterrestres” para manipular a la humanidad. En el último de sus libros llamado el Apocalipsis se habla del fin del mundo, de una hecatombe mundial que aniquilará a la humanidad, pero claro que quedarán los “elegidos” por estos “seres extraterrestres” para volver a poblarla.
En realidad el Apocalipsis está siendo planeado por estos "extraterrestres bíblicos" para acabar con la humanidad. Sin embargo, hay otros “seres extraterrestres” que desean ayudar y apoyar al ser humano para no dejar que se apoderen de este azul planeta y están tratando de impedir que el “holocausto nuclear” se lleve a cabo, pues una explosión nuclear no solamente afecta al Sistema Solar sino a toda la galaxia, por no decir a todo el Pluri-Universo. Los dirigentes de las sociedades humanas y de los poderosos gobiernos de EE.UU, Rusia, Europa, China son controlados y manejados por estos seres alienígenas que desean el Apocalipsis ahora. El gobierno de EE.UU está siendo manipulado por seres extraterrestres que desean la ruina y la esclavitud humana, por algo las últimas guerras imperialistas son un grito desesperado de estos "extraterrestres bíblicos" para acelerar la formación del Imperio que tanto han preparado en el transcurso de los siglos, para después lograr hacer realidad la hecatombe nuclear.
En 1947 en Roswell, EE.UU, se supone que se estrellaron algunas naves espaciales cuyos tripulantes extraterrestres fueron muertos. Los medios de comunicación y los gobiernos lo mantuvieron en secreto ya que son controlados por extraterrestres que desean la manipulación total de la humanidad para mantenerla ciega sobre lo que está pasando en sus narices. En verdad, ya los Nazis tenían sus naves espaciales en forma de platillos voladores cuya tecnología fue especializada y traspasada luego a la CIA después de la segunda guerra mundial. CIA y Nazis son cobayas de los extraterrestres, hasta el mismo Hitler fue una marioneta perfecta para lograr que 60 millones de seres humanos sean muertos en rituales de sangre y fuego por el exterminio masivo en la segunda guerra mundial. El mismo masón Harry Truman, ex-presidente de EE.UU no fue más que otra marioneta para que se arroje la primera bomba atómica sobre población civil en Hiroshima, que según los imperialistas no será la única.
El verdadero objetivo de estos extraterrestres es formar un Imperio en el planeta Tierra que han llamado el Nuevo Orden Mundial, y para lograr este objetivo es necesario la guerra a escala planetaria y la matanza masiva de humanos que puede fácilmente terminar en un holocausto nuclear. Esto es algo que está pasando en nuestras narices por lo que es absolutamente necesaria una reacción de todos si queremos sobrevivir. El Nuevo Orden Mundial será una dictadura tan inhumana y pervertida como la practicada por los Nazis. Hace pocos días en EE.UU, los Nazis de la CIA ya legalizaron la tortura y la ruina total de la libertad humana, no sería raro que luego “legalicen” el genocidio para acelerar los planes de exterminio humano para el beneplácito de seres extraterrestres y sus fuerzas negativas.
