La Bomba Atómica es la consecuencia de la descomposición moral que actualmente vive la Humanidad, es un síntoma de la enfermedad y la demencia, es la muestra de que “el mundo se ha vuelto loco”. La civilización humana está desmoronándose hacia una hecatombe sin precedentes, vivimos en un canibalismo social escalofriante y una carnicería bestial por dominio y competencia atroz, donde reina el insano egoísmo, y donde los enfermos y corruptos dirigentes que ostentan el poder temporal-social, con ignominia moral, infamia y gangrena espiritual, se han armado de Bombas Atómicas para defender su dominación demoníaca y execrable poder mundial.
El “diablo” (o sea el Mal supremo, el caballero de cuernos y terno) está suelto en el mundo, en el trono del poder mundial, haciendo sus atrocidades y genocidios en las calles de las ciudades, en el enfermo inconciente colectivo, en las violaciones, en los asesinatos, en la guerra, en las masacres, en las cárceles, en la tortura y el abuso, en la pornografía infantil y la pedofilia, en la corrupción y el materialismo, en el ojo maldito de la envidia, en la insana sed de poder, en el odio…el “diablo” ha dominado en este planeta los últimos seis mil años, quien sabe cuantos milenios más, el maldito Reino del Terror se ha levantado sobre las montañas de carcasas de la vergonzosa e infame historia humana, y en el futuro solo se visualiza cenizas y la lluvia de radiación. La civilización genocida y su “diablo” gobernante están a punto de arrojar Bombas Atómicas a toda la humanidad, llegando al desenlace del PLAN de exterminio y destrucción ingeniado en el albor de los tiempos. El objetivo primordial del Mal Supremo: la aniquilación de todas las cosas, usar el átomo y la anti-materia para hacer desaparecer a la materia, llevar a todo el universo a un solo “agujero negro”, destruir la luz y la vida. La humanidad se ha convertido en su “bestia de carga” para llevar a cabo esta insanidad diabólica de apagar la luz de las estrellas, pues“aquello que odia al amor” quiere acabar con nuestro ser, está planeando la aniquilación total en nombre del odio y la perturbación mental. ¿Pero como este “diablo”, rey de las tinieblas, ha llegado a tener tanto poder que ahora tiene a la humanidad en su pulgar a punto de exterminarla, haciendo que nos matemos los unos a los otros gracias a la ignorancia y a su perversa manipulación? ¿Por qué la humanidad tomó el camino de la estupidez colectiva? ¿Quién nos está dirigiendo al abismo?
El “diablo” no es más que el producto de nuestra ignorancia y la falta de percepción, el “diablo” es la enfermedad de nuestra psiquis, es el cáncer del espíritu, nuestra ceguera, es el desequilibrio de las fuerzas, es la desarmonía de la luz y la sombra, la lucha de los opuestos, el “diablo” es la inclinación por el “lado oscuro de la fuerza”, el resentimiento y el odio, los “agentes del diablo” son encarnaciones del odio y la vileza, de la putrefacción e infamia. Y la humanidad está poseída, necesita urgentemente una purgación para curarse y sacar toda esta podredumbre del ser que está carcomiendo al planeta y exterminándose a sí misma. Los seres humanos necesitan una “limpia” para sacarse esta terrible enfermedad colectiva e individual. Cada uno debe “abrir” los ojos y ver bien lo que pasa a su alrededor, tomar conciencia que esta civilización “diabólica” ha sido diseñada para su propia ruina y esclavitud, darse cuenta que la psique colectiva está siendo manipulada y enfermada por los “agentes del diablo” (los híbridos enfermos humanos del poder mundial) para acelerar los planes de aniquilación, ambición e inmundicia humana. La humanidad está descarrilada, fuera de control, y al tren de la civilización se le fue una rueda, estamos cayendo…hay que levantarse y rebelarse contra el Imperio del Horror como guerreros que defienden la Tierra si queremos sobrevivir como especie humana. Nuestra existencia y la existencia de nuestra madre tierra están amenazadas por los miserables y diabólicos poderosos imperialistas que quieren el “exterminio humano”. No podemos seguir siendo ovejas de un rebaño vergonzoso, esta sociedad tecnificada, masificada y moldeada por las fuerzas del egoísmo y el materialismo, no en vano William Blake llamaba al industrialismo los “talleres de Satanás”, la tecnología es la mejor herramienta del “diablo” para arruinar a la humanidad. Mientras continuemos colaborando con el sistema de la hipocresía y la superficialidad, el “diablo” estará más fuerte, porque las almas perdidas en la ignominia y en la falsedad son presas fáciles de la manipulación y de la ruina del espíritu.
Miles de millones están ciegos, colaborando con el “diablo”, en una putrefacta pseudo-cultura y forma de vida, en una pestilencia religiosa monoteísta, alabando al “dinero”, a la raíz de toda moral inmundicia, perdiendo sus almas en los “templos del materialismo” de la decadente sociedad, manejados por los amos perversos del capital, los dueños de los bancos y empresas, enfermos decadentes de la podredumbre social-capitalista. Mientras miles de millones viven en pobreza extrema y hambre, ya que al “diablo” le interesa el genocidio en todas sus formas, por eso las políticas del Imperio causan hambrunas y miseria para exterminar la mayor cantidad de seres humanos…el “Mal Supremo” está sentado en las oficinas de la ONU, en el Banco Mundial y en el Fondo Monetario Internacional, es dueño de la Coca-Cola, Nike, Nestlé, McDonals, Chevrolet, Panasonic, de las fabricantes de armas General Dinamics, Raytheon, General Electric, Martin Lockheed, presidente de Wall Street y del Estado de EE.UU, presidente de la Unión Europea y del Estado de Israel, dueño de la Texaco, Exxon Mobil, Unolocal, AGIP, ELF, Shell, banquero del Chase Manhattan Bank, del Citybank y del Club de Roma y de París, miembro del American-Israeli Public Affaires Comitee, Club de Bilderberg, Comisión Trilateral, grado 33 de la masonería y gran maestre Illuminati, Anciano de Zion, Bohemian Groove, Skull and Bones, Mesa Redonda, jesuita…etc. El “diablo” es el amo de este mundo, el patrón de la esclava humanidad, y la historia humana y toda su esclavitud ha sido diseñada para formar este Imperio del Horror comandado por las fuerzas más enfermas y dementes de la psiquis humana, gracias a sus “organismos internacionales” y “sociedades secretas” cuya demencia y enfermedad fueron tan admirados por el “diablo” que fueron “elegidos” por este “Mal Supremo” para gobernar al mundo, diseñar la putrefacta civilización global, construir miles de Bombas Atómicas por todas partes y provocar así un verdadero genocidio, un infierno en tierra.
El Plan de conquista mundial y de llevar a la humanidad a una infernal hecatombe moral está llegando a su fase culminante, pronto los EE.UU, la Unión Europea e Israel, grandes cuarteles del “diablo”, grandes-“satanes” que provocan atentados terroristas en sus propios territorios para acusar a sus creados enemigos (los “atentados de falsa bandera”), bombardearán con Bombas Atómicas a Irán, lo que provocará la reacción inmediata de Rusia, China, India, Pakistán y el resto del mundo, también dominados por el “Diablo”, encarnizándose la extrema y apocalíptica violencia que ya se vive en Irak y en Afganistán, acelerando el exterminio por la ignorancia y enfermedad, codicia diabólica y ambición desmedida. La geo-política del Terror es diseñada desde los cuarteles del “diablo” en las oficinas de la Casa Blanca y en las Logias Masónicas, el Plan es culminar la dictadura-nazi del Nuevo Orden Mundial para esclavizar y exterminar la mayor cantidad de seres humanos, construir más campos de concentración, ejercer la tortura y matanza como política del miedo, imponer un solo gobierno mundial, una sola religión, una sola economía, un modelo de vida de control, vigilancia, castigo, un solo “rey del mundo”, “rey de las tinieblas” y un infierno en tierra.
En realidad DIOS es el Diablo, la Iglesia Católica huele a azufre, El Papa Ratzinger es un demonio perverso que hace magia negra y manda a millones de católicos por todo el mundo en su podrida y decadente sociedad capitalista-cristiana; así mismo, en las sinagogas de Satanás se respira la enfermedad, el extremismo imperialista judaico es una amenaza, su fundamentalismo crece cada día, las doce tribus de Israel piensan “conquistar la tierra” en honor de su diabólico Yavé para cumplir con sus insanas profecías mesiánicas-apocalípticas. El Gran Arquitecto judeo-masón está diseñando el genocida Nuevo Orden Mundial acorde con el mito del “rey del mundo”, el mesías del judaísmo, el mismo “diablo” machista que ha diseñado esta sociedad “occidental” intolerante, esclava, violenta, ignorante, excluyente, hipócrita, la podredumbre social en su máxima expresión. De igual forma, en las mezquitas del “diablo monoteísta” islámico también se siente el fundamentalismo y la intolerancia machista, mantiene esclavo y fuera de sí al pobre ser humano sometido a supuestas leyes divinas patriarcales, sometiendo a la mujer con violencia y justificando matanzas en nombre de la “guerra santa”. En verdad, el monoteísmo, judío-masón, o masón-árabe, es la adoración al “diablo”, por eso el holocausto nuclear será provocado por la ignorancia religiosa del monoteísmo y por la ambición demente de unos cuantos psicópatas diabólicos. Islam y Judeo-cristiandad se destruirán mutuamente en nombre de sus propios “diablos como Jehová y Alá” para formar el Nuevo Orden Mundial…
El “diablo” manda en este mundo y estamos a punto de vivir la hecatombe atómica, el caos total y el temblor universal, porque no hemos equilibrado a los opuestos en nosotros mismos, la enfermedad psíquica se expresa en el extremismo de las religiones monoteístas y sus endemoniadas “sociedades secretas” que deben desaparecer por el bien de la humanidad, para la liberación. Su fundamentalista unilateralidad y sus dogmas dementes necesitan una curación urgente, antes que sea demasiado tarde y la humanidad se desintegre entre su diabólica radiación nuclear.
No hay otro Dios-diablo que uno mismo, en nosotros están la luz y la oscuridad, somos la reconciliación de los opuestos, somos el yin-yang, fuego, agua, aire, tierra, somos la conjunción del ser y de la nada, más allá del bien y del mal, más allá del Dios y del “diablo”, tenemos que curarnos ya que somos LOS DIOSES DE LA TIERRA, GUERREROS QUE TENDRÁN QUE DEFENDER LA VIDA Y LA TIERRA POR LA LIBERACIÓN, ANTES DE QUE EL DIABLO CUMPLA CON SU OBJETIVO DE EXTERMINAR A TODOS…
