En el 11 de Septiembre del 2001, 29 años después del genocida golpe militar en Chile, el gobierno ultra-derechista de EE.UU, con la ayuda de servicios secretos gubernamentales del Reino Unido, Israel, Pakistán, y otros agentes privados de transnacionales, realizaron uno de los peores atentados terroristas en suelo norteamericano (después del genocidio contra los nativos indígenas durante más de tres siglos). Un ataque de “falsa bandera” transmitido por todos los canales de Televisión, como vil propaganda para culpar al mundo musulmán de terrorismo, fue perpetrado por el propio gobierno de EE.UU, para tener la excusa de invadir y ocupar países islámicos ricos en recursos naturales como Irak, Afganistán. El terror fue usado para imponer más terror alrededor del mundo, más inseguridad, dolor y desarraigo, para controlar y saquear recursos naturales, en base a intereses imperiales. Se está cuajando un nuevo orden social en base al miedo y al horror, la más pura manipulación, para así cambiar radicalmente las leyes en pos de un Estado totalitario mundial al puro estilo nazi o stalinista…la más grande infamia (genocidios, hambrunas, guerras) se está realizando en este instante en nombre de la “seguridad energética”, la “democracia”, la “paz”, “los derechos humanos”, “la libertad”…
Los genocidas imperiales de todos los tiempos han usado siempre el terror para apaciguar y aglutinar a las masas humanas, en sus discursos ellos traen “prosperidad”, tal como lo hicieron hace cinco siglos los europeos en América que vinieron a asesinar en masa y a esclavizar a la población nativa con la excusa de “civilizar” a los pueblos nativos “salvajes”. El infame y putrefacto mundo de hoy no es la excepción, la matanza y violación en masa, las bombas, las torturas y encarcelamientos masivos, la imposición de un régimen de terror, militarización y abuso de poder, están siendo practicados por el mismo Imperio de occidente con la vista gorda de todo el mundo, los asesinos plutócratas de EE.UU, Europa e Israel, están realizando una “limpieza étnica” en varios lugares del mundo, asesinato en masa, horror, parálisis, de tal forma que el saqueo y el robo de los recursos naturales, que han llamado “liberalización de los mercados”, siga indigestando a las sociedades glotonas y abusivas del “mundo desarrollado”. El emporio empresarial mundial, cuyos dirigentes son mafias, o mejor dicho, “personas naturales o propietarios privados” de las monstruosas empresas capitalistas transnacionales, bancos, compañías financieras, oligarquías multinacionales, han forjado la globalización del Imperio con la más vil matanza, robo, saqueo, corrupción, genocidio. Los gobiernos de EE.UU, Reino Unido, Francia, Alemania, España, Canadá, Suiza, Israel etc, países que acogen los centros de las empresas transnacionales, son protectores del saqueo y del robo a nivel mundial. Es decir que militares, policías, agentes de gobierno de estas naciones imperiales (CIA, MI6, Mossad) son viles servidores del gran emporio empresarial judeo-burgués que domina el mundo, harían cualquier cosa (como atentados terroristas, guerras genocidas, hambrunas) por la globalización del “libre mercado”, la privatización de todos los recursos naturales en manos de los más mezquinos, ambiciosos, codiciosos, asesinos.
En Irak, este demencial programa de imperialismo y saqueo de recursos, está llegando a niveles inconcebibles de horror y muerte. Desde la brutal invasión de EE.UU y sus aliados con crueles y genocidas bombardeos en marzo del 2003, hasta este instante, la matanza en masa, el dolor y el desarraigo del pueblo humano no han parado, todos los días hay incursiones de soldados de ciudad en ciudad, de pueblo en pueblo, de casa en casa para imponer el terror en el apocalíptico Irak. Los soldados imperiales terroristas entran de casa en casa a violar y matar, a saquear y robar, a separar familias, a encarcelar y torturar personas inocentes, a asesinar en masa al indefenso pueblo civil, también ejecutan bombardeos con NAPALM, uranio empobrecido, armas químicas y biológicas sobre gente indefensa. Los EE.UU son los primeros productores de armas de destrucción masiva y obviamente los primeros que los usan, por el negocio de este infernal país y su complejo militar-empresarial. Ya es más de un millón de personas (niños, mujeres, jóvenes, adultos) asesinados a sangre fría por el gobierno terrorista de EE.UU y sus aliados, junto con las fuerzas armadas del gobierno mundial ONU-OTAN. Y nadie dice nada al respecto, los hipócritas gobiernos y sociedades civiles en todo el mundo son manipulados por la vil propaganda de los medios masivos, y miran como si fuera un espectáculo de Hollywood el genocidio en masa de personas inocentes por parte de los ejércitos imperiales, los valores humanos se han aniquilado, esto es un nihilismo feo. La indiferencia es atroz, la ignorancia es absoluta en este pútrido mundo, la hipocresía es total, nadie quiere aceptar que el genocidio en Irak, Afganistán, Palestina, se debe a la “liberalización de mercados”, a la privatización de recursos naturales, al saqueo y robo de riquezas al puro estilo pirata asesino, al genocidio geopolítico de la globalización-Imperio. En Irak, los pozos petroleros y reservas de agua han pasado a manos de empresas privadas norteamericanas, europeas, quienes ya tienen construido oleoductos que llegan hasta Israel, protegidos por las Fuerzas Armadas del Imperio, junto a sus “empresas de seguridad” de asesinos mercenarios paramilitares. La “limpieza étnica” es un negocio redondo de los inmundos capitalistas que mandan en occidente, la muerte y el horror están imponiendo el orden.
Pero el infierno que está viviendo Medio Oriente se vive en muchas partes del mundo, pues desde siempre el terrorismo de Estado fue la primera herramienta de dominación y subyugo a los pueblos, como lo han venido haciendo los asesinos-piratas de occidente en el continente africano desde hace siglos. Se nos dice, por ejemplo, desde las pútridas agencias de noticias occidentales, que las guerras civiles en República del Congo, Ruanda, Somalia, Sudán, Kenia, se deben a guerras civiles étnicas-fraticidas, pero nada más alejado de la realidad, las guerras civiles son provocadas por la “liberalización de los mercados”, son las empresas transnacionales de occidente quienes contratan fuerzas paramilitares y “empresas de seguridad” para proteger el saqueo de las riquezas naturales como diamantes, minerales, petróleo, etc. y al mismo tiempo, también se filtran en grupos de resistencia a través de
Pero parece que la guerra y el hambre generalizada en todo el mundo, provocados por el saqueo y el robo del emporio empresarial de occidente, no son suficientes en la agenda de estos genocidas. Una guerra mundial a escala jamás antes vista está siendo diseñada desde las altas esferas del poder. Unos cuantos “elegidos” en los gobiernos y empresas más poderosas, se están encargando que los pueblos hermanos entren en una guerra genocida para beneficio del Imperio Mundial. Tal como está ocurriendo en la región andina-amazónica sudamericana, donde los tres países de la ex Gran Colombia, Ecuador, Colombia, Venezuela, que comparten los mismos colores en su bandera, están siendo llevados de la mano hacia una guerra fraticida de proporciones dantescas. Son más de 60 años que Colombia ha vivido un verdadero infierno en tierra para beneficio de la oligarquía mundial, con matanzas en masa, secuestros, extorsiones, sicariato, etc. Desde el “boom” de la cocaína y del petróleo en los 70`s y 80`s, la mafia mundial que domina en Wall Street, junto a las mafias locales colombianas, se apoderaron del negocio de cocaína en una sangrienta guerra sin cuartel contra todo aquel que se oponga a su autoridad, decenas de miles de sindicalistas, activistas, políticos, defensores de derechos humanos, fueron brutalmente asesinados por las mafias que se tomaron el control de Colombia con la ayuda del terrorista gobierno de EE.UU. No pueden ocultar el sol con un dedo, el primer narcotraficante es el gobierno de EE.UU,
El terrorista asesino de masas, George W.Bush, presidente del reino del egoísmo EE.UU, y su posible reemplazante Hillary Clinton, ahora enfatizan en sus discursos que Venezuela y Ecuador están apoyando al terrorismo al tener contactos con las FARC, tildados estos últimos como terroristas por parte del terrorista gobierno de EE.UU. Es evidente que con engaños y eufemismos, los EE.UU están forjando una guerra regional entre estos países para luego invadir, ocupar y militarizar la zona andina-amazónica en nombre de una “pacificación” (Plan Colombia) y así saquear los recursos naturales en la rica cuenca amazónica. El plan de EE.UU es construir decenas de bases militares en toda la región a como de lugar para patrullar y proteger el saqueo del petróleo y recursos narturales, (especialmente el petróleo de Venezuela que tanto necesita la máquina infernal de occidente), la zona será militarizada y el libre saqueo de recursos asegurada por las política de “seguridad energética” del Imperio, en base al terror, la guerra fraticida y la más horrenda manipulación. Es decir, la terrorista guerra global contra el terrorismo, de asesinatos en masa, encarcelamientos masivos, tortura y aniquilación física y psicológica, es sustentada por el poder económico del emporio empresarial transnacional y su “libre mercado” de atrocidades…
