Friday, May 14, 2010
APOCATÁSTASIS AHORA
El siguiente es un texto S.O.S en uno de los momentos más cruciales, críticos y decisivos para todos… el sistema solar se acerca poco a poco al centro de la Galaxia Vía Láctea, un agujero negro de extrema densidad en donde cientos de millones de estrellas como el Sol dan vueltas en espiral a su alrededor. Nuestro Sol se acerca peligrosamente a este núcleo galáctico que es rodeado por el Plano o Falla galáctica, un cinturón de fotones provocado por el campo magnético de este núcleo. El Sol está entrando en este Plano, su propio campo magnético está afectado considerablemente, esto explica la agresiva actividad solar: una cantidad anormal de manchas solares y tormentas solares sin precedentes ocurren en este instante, afectando a todo el sistema solar. El mismo campo magnético del sol está siendo alterado y lo que antes era el polo norte solar, ahora es el polo sur solar, se han invertido los polos y todo el electromagnetismo solar. Esto altera a todos los planetas que rotan alrededor del sol, incluyendo al planeta azul que nos da cobijo y que actualmente sufre de un "cambio climático".
Las pulsaciones, o frecuencias de onda de la Tierra constituyen el campo magnético planetario. Estas ondas de resonancia se conocen con el nombre de “Resonancia Shumman”, necesarias para que se pueda dar la vida, descubiertas por el científico físico alemán W.O. Schumann entre 1952 y 1957. Podrían considerarse como el “latido” cardiaco de todo el planeta, y tiene su frecuencia normal de 7.8 hz/s (hertz por segundo). Actualmente, por la insólita actividad solar debido al acercamiento del sol al núcleo galáctico, y por el cambio mismo de su campo magnético, la ionosfera terrestre y su magnetismo están siendo alterados, por lo que las ondas de la Resonancia Shumman están aceleradas, y desde 1980 son de hasta 12 hz/s. Esto es realmente alarmante, es la razón por la cual parece que el tiempo pasa más rápido. Cuando esta resonancia llegue a 13 hz/s, el campo magnético de la Tierra sufrirá realmente una inversión, el polo norte magnético se irá hacia el polo sur magnético, será un verdadero caos porque las brújulas enloquecerán, y la Tierra empezará a rotar en sentido inverso, el sol saldrá por el Oeste y se pondrá en el Este, la corteza terrestre se desplazará, lo que causará terremotos, erupciones volcánicas, desastres climáticos y una Ola Gigantesca de proporciones cataclísmicas… Esto no es catastrofismo ni morbo apocalíptico, es una realidad que se presenta de acuerdo a los datos y a las señales de los tiempos.
Esto ocurrirá dentro de poco,…, por lo que hay que estar atentos, alertas, preparados para todo lo que se viene. Las civilizaciones pasadas como egipcios, mayas, atlantes advirtieron a sus descendientes milenarios que esto ocurriría, dejaron signos y señales en sus jeroglíficos y monumentos para que la humanidad de hoy pueda interpretarlos, dejaron indicios sobre otras catástrofes que hicieron desaparecer a las civilizaciones como la Atlántida, Lemuria o Mu, y advirtieron a la humanidad futura sobre lo que tendrá que vivir. El gran cataclismo, que en varias mitologías llaman “Diluvio”, ha ocurrido antes, y volverá a ocurrir quien sabe cuántas veces en la eternidad de los ciclos, en el ir-yendo cósmico. No es la primera vez que el Sol entra en la Falla galáctica del cinturón de fotones del núcleo galáctico, y no será la última. Estamos viviendo, realmente, tiempos cruciales, cambios radicales.
Que no cunda el pánico, un cambio de ciclo se aproxima, las estrellas y los zodiacos siguen su eterno devenir, y un Cataclismo de proporciones universales se aproxima como clausura de una época enferma (kali-yuga), y otra era comenzará, que no es ni nueva ni vieja, solo es otra era. Y así como las ondas del centro galáctico de la Vía Láctea afectan el electromagnetismo de todo el sol y el sistema solar, así mismo afectan a todo ser vivo del planeta Tierra. Los seres humanos, animales, plantas, minerales están experimentando en este instante otras vibraciones de onda que emana el centro galáctico, no son ni positivas ni negativas, simplemente son otra frecuencia de onda. Es posible que la misma vibración de nuestro ADN esté cambiando también por este motivo. Tenemos 12 hélices de ADN, los cuales solo utilizamos dos, hay 64 códigos posibles de ADN que están dormidos en nuestra sangre, las combinaciones están ahí, solo hace falta despertarlas. Si las vibraciones de onda que emana el núcleo galáctico son canalizadas con vibraciones positivas para despertar la infinita posibilidad de nuestro ADN, seríamos más que dioses, habitaríamos en los diferentes planos conscientemente, nuestras capacidades mentales, espirituales, cerebrales, se dispararían hacia el infinito, sería realmente un éxtasis colectivo, una verdadera liberación.
Sin embargo, los poderes establecidos, a pesar de que están al tanto de que el Sol se acerca al núcleo galáctico y que un Gran Cataclismo es inminente, están impidiendo de cualquier forma que los seres humanos despierten sus potencialidades psíquicas, espirituales y físicas, están evitando de cualquier forma la liberación y la emancipación, porque su dominio sobre la humanidad terminaría. El sistema de la muerte, de la esclavitud y de la humillación, estaría entrando a su descenso final, no solamente porque la furia de la naturaleza arrasará contra toda la civilización, sino que después, quienes sobrevivan al desastre serán una tribu post-apocalíptica, una super-humanidad y una supra-cultura emergiendo de las cenizas sin que nada ni nadie la detenga, hoy en día cada vez hay más gente que experimenta el infinito y la eternidad, la experiencia mística, la iluminación, cada vez más gente despierta su infinito potencial, cada día más personas sienten la plenitud y el éxtasis…nadie puede irse contra la corriente. De allí la desesperación y angustia de las élites por acelerar el establecimiento del Nuevo Orden Mundial, como acto de total desesperación para que los humanos no salgan de su dominio y esclavitud.
Así es que una guerra electromagnética contra los seres humanos está ocurriendo en este instante: todo tipo de baja vibración (hipocresía, inmundicia moral, traición, desastre espiritual, magia negra), y ondas de baja frecuencia como las que emanan los teléfonos celulares, televisiones, computadores u hornos micro-ondas, así como las que emana el complejo de antenas del arma electromagnética/climática del gobierno de EE.UU, Proyecto HAARP, son deliberadamente emanadas por el sistema de la muerte para detener el despertar del ADN, para dañar y arruinar la salud de los seres humanos, para mantenernos esclavos y ciegos. Y no olvidemos el Proyecto Blue Beam, que sigue en ejecución, un plan diseñado por los gobiernos más poderosos del mundo como antesala del Gran Cataclismo, por el cual con tecnología de última generación van a diseñar un holograma de una invasión extraterrestre para desatar el pánico entre la población y justificar la militarización absoluta del sistema de la muerte. Con ondas de baja frecuencia crearán hologramas de fantasmas, demonios, monstruos que desatarán el suicidio colectivo, llevando a la humanidad a tal nivel de desesperación que con gritos aceptará la llegada del “salvador” y “mesías”, un Comando Ashtar de la imperialista Federación Galáctica, que reinstaurará el orden, objetivo último del mesianismo imperial, instaurar el benéfico e internacional-socialista nuevo orden mundial pos-nuclear, la utopía del zeitgeist y la holocracia. Así mismo, el plan de insertar un microchip a cada habitante del planeta forma parte de la agenda para dañar y adormecer el potencial infinito de cada ser humano, en la agenda para la creación de una cárcel global, un inmenso y colosal campo de concentración del genocidio.
No obstante, por más que desaten una Tercera Guerra Mundial (EE.UU, Israel con la ayuda de la OTAN están a punto de atacar a Irán, lo que provocará la reacción nuclear china y rusa), para la militarización total del planeta, y pretendan exterminar a todos los seres humanos antes del gran Cataclismo, no pueden parar la emancipación. Por más que engendren las más bajas vibraciones de horror, miedo y odio, no podrán detener la corriente electromagnética positiva que emana del núcleo galáctico, la vibración de que da la vida, no podrán detener las oleadas de despertar que están llevando a otros planos de consciencia a un gran porcentaje de seres humanos. No podrán detener la liberación, el éxtasis, la realización total ni la resistencia del verdadero amor.
Estamos en una encrucijada… mientras aguardamos el desenlace final, es hora de dejar de ser meros espectadores, y ser actores, amos de nuestro propio destino. Parece que entramos en un portal transdimensional, es menester mantenerse real, impecables, leales y honestos con nosotros mismos, para tener la fortaleza del alma para luchar por la vida, por el amor de nuestros hijos, y los hijos de nuestros hijos…