Por más infierno que
se desate en la tierra, la vida siempre será posibilidad infinita, porque nada
está determinado, todo es posible y perfectible; y si a mi alrededor se ha
desatado el infierno en tierra, le abofeteo a la sociedad cuando en mi interior
estoy en mi paraíso terrenal. Sé que la civilización en la que me tocó vivir
está en pleno derrumbe, que el cataclismo social está en marcha, pero como
todas las civilizaciones nacen, se reproducen y mueren, y así en eterno ciclo,
así mismo la civilización actual está en pleno declive, escribiendo su propio
epitafio, en la era más oscura, en la era de la decadencia. La civilización se
ha convertido en un inmenso campo de concentración, y esto no es subjetivo, es
una realidad, como una olla de presión el mundo está a punto de estallar. La
masa crítica está aquí, son las señales de los tiempos, está desplomándose un
imperio en nuestras narices, y la humanidad está optando por el camino de la
ceguera, la estupidez, la hipocresía, el suicidio, la deslealtad, la traición, etc…estas abominaciones se enarbolan como pilares de la sociedad establecida, pues sin
corrupción no funcionaría el mundo, el infierno terrenal está a la vuelta de la
esquina. Sigue existiendo la ignominia, la corrupción, el negocio del asesinato
en masa, la mentira es reina y ama, la desinformación y falsedad son llamadas “medios
de comunicación”, la mentira aparece como “verdad absoluta”, y así el
fanatismo, el fundamentalismo, el extremismo y radicalismo se apropian de la
descabellada y entorpecida humanidad.
Se levanta así en forma de hongo nuclear la
crisis de valores de una humanidad matándose a sí misma en el fango del
materialismo, la insensatez colectiva, la pérdida de sentido, el absurdo y la
estupidez social materializándose en la inmensa ignorancia y fanatismo de
quienes ostentan el poder político económico material. Banqueros, políticos,
dueños de corporaciones transnacionales, burócratas narcos, mafiosos con poder
global y policial y nuclear, traficantes de almas, los más infames se instauran
como amos y modelos a seguir. Cuando la plata manda muere la ética, el
mercantilismo encarna en la degeneración moral, el relativismo axiológico, la
falta de marcos directrices de la existencia, el vacío espiritual de los
muertos vivientes del consumismo masivo, la decadencia del zombi consumista.
Producto de esta decadencia, los nefastos dogmas económicos,
políticos y religiosos justifican la matanza, el racismo, la discriminación, la
intolerancia, la pobreza, la miseria como negocio, la imbecilidad global. Por
ejemplo todas las religiones monoteístas son venenosas creencias suicidas,
servidumbre espiritual y moral, mafia institucional, esclavitud ontológica; el
monoteísmo es en sí el “apocalipsis”. El judaísmo, el cristianismo, el islam se
iniciaron como sectas que deformaron el mito de la total destrucción del
universo y el arquetipo de la re-generación, de la eterna generación de mundos
y universos, y empezaron a creer en una “creación de un solo dios” y “un fin del mundo”, y a esto llamaron “apocalipsis”. Los enfermos
mentales de las sectas y religiones apocalípticas, monoteístas y catastrofistas,
malinterpretaron los mitos de la re-generación o fin del mundo, en el ciclo eterno de los ciclos no hay un
fin ni un comienzo, solo hay eternidad… los brujos oscuros del “creacionismo monista” y
del “iluminismo”, que por más que hagan pactos nefastos con entidades de la
oscuridad que anhelan la “destrucción de la materia”, jamás podrán detener la re-generación
de todas las cosas en el devenir infinito y eterno. Los pedófilos sacerdotes de
la ignominia, defendidos por las instituciones religiosas, están acelerando el “fin
del mundo”, supuestamente para destruir la “creación”, porque ellos inventaron
la idea de “dios” pero al mismo tiempo la idea del “diablo” parar acelerar la
batalla final el “fin de los tiempos”, la llegada de la total decadencia y del
salvador de los sumisos y de los zombis de la sociedad de consumo.
El judaísmo, como una de las primeras religiones
monoteístas, es un síntoma nefasto del mismo “apocalipsis”, creencia que es en
sí producto del “fin de los tiempos”,
por ese insano “mesianismo” que espera el “apocalipsis” para la llegada del “mesías”
del judaísmo que vendrá como un “rey del mundo”. El Estado de Israel es la
razón de ser del próximo Armagedón, según sus propias creencias, el Estado de
Israel es la señal de la llegada del mesías judío, es el apocalipsis, y así lo
dice el Talmud cuando los judíos ostenten todas las riquezas materiales del
mundo, llegará el “mesías en el fin de los tiempos”…
El ser humano débil mental de su secta o religión, el
hombre-rebaño que necesita una autoridad espiritual porque es abyecto
internamente, exige creer en algo para no arrojarse al abismo, necesita alguien
que le diga como sostener espiritualmente su existencia, necesita creer que va
a llegar su “salvador” y su “dios”. Ser sometido desde lo más profundo de su
ser se explica porque es un ser humano fragmentado, sin fortaleza interna para
crear sus propios valores y certezas. El veneno de las “sagradas escrituras” de
todas las religiones se aprovechan del vacío espiritual de la era, y así, todas
las religiones, sectas, ideologías, sistemas de creencias, tratan de explicar
la razón de ser de la existencia para
pastar a su rebaño zombi, mientras los jefes de las sectas absorben la energía psíquica de los muertos
vivientes que han perdido el sentido de la admiración y maravilla por la
existencia, alimentando al monstruo de la desidia dogmática.
Ahora más de la mitad de la población humana es dogmática e
intolerante. Es cerrada, cuadrada, terca, enceguecida por la estupidez de su
dogma. Son germen de la discordia, de la guerra civil, de los egoísmos, de las traiciones, de las matanzas
por dinero, de las nefastas "guerras religiosas"…en realidad, lo que provocan es un sacrificio en masa dado por los sistemas de creencias para alimentar a nefastas entidades de otros
planos o dimensiones, abominaciones que
absorben la energía psíquica y que pactaron con la inmunda y traidora élite
humana para llevar al mundo a un inevitable cataclismo mundial, una masónica
tercera guerra mundial, sacrificando en masa a miles de millones de seres humanos
como ritual de sangre para las entidades negativas de los mundos paralelos.
Echemos un vistazo a nuestra realidad: el ISIS o Estado Islámico, Daesh en Árabe, es una creación del Israel Secret Intelligence Service, ya que el mismo Abdul Bakr Al Baghdadi,
líder teólogo del Estado Islámico es un agente de la Mossad, los servicios secretos
israelitas con sus agencias títeres paralelas, la CIA de EE,UU y el MI6 de Inglaterra. Los fanáticos
islamistas que están decapitando en masa y asesinando para una limpieza étnica sirven a los intereses de EE.UU que anhela la remodelación del mapa geopolítico del Medio Oriente con una "limpieza étnica". Están queriendo instaurar un Califato fanático con dinero, entrenamiento y armas de EE.UU, Israel, Arabia
Saudita, Qatar, bajo órdenes de aquellos que están asesinando a niños en Palestina, entrenan, financian, y arman a los fanáticos sunitas,
wahabitas, sauditas del Daesh y sus sanguinarios seguidores o Escuadrones de la Muerte, los tontos útiles del imperialismo sirven para desatar
el infierno total en Medio Oriente, despoblar esa zona del planeta para el control corporativo de recursos naturales y beneficio de Israel. Están remodelando geopolíticamente la región para el
saqueo de recursos y la ampliación del infame Ertz Israel, consolidando el sueño
descabellado de los apocalípticos sionistas-cristianos de hacer estallar la
tercera guerra mundial desde el Medio Oriente para crear este inmundo “gran
Israel” o “tierra prometida”, llevando a la humanidad entera a su propio infierno y extinción… lo que está pasando en Irak, Siria, Palestina, Libia,
Somalia, Sudán, y por lo visto pronto se suman Turquía, Irán, Líbano, etc. es ya la
Tercera Guerra Mundial. La crisis ucraniana es otro polvorín que
conducirá a los BRICS y a la Cooperación de Shangai a un enfrentamiento directo
con EE.UU y la OTAN, no es difícil darse cuenta que ya está estallando un
conflicto sin precedentes, un verdadero armagedón….el fuego que está ardiendo en Medio Oriente debe ser
apagado antes de que propague a todo el planeta. Pero los demonios sionistas de
EE.UU, Israel, la Unión Europea, la OTAN están echando más fuego al infierno
que ellos mismos provocaron desde su milenario colonialismo genocida, la "Gran Catástrofe" ("nakba" mundial) de la creación del
Estado de Israel en 1948, la invasión y ocupación de EE.UU en Irak y Afganistán, la
guerra civil en Siria, etc...todos estos ríos de sangre humana sigue labrando el
camino de los mercaderes de la muerte para exterminar a la humanidad.
Y tanto la guerra, la pobreza, el hambre, la tensión social,
son fabricaciones humanas, así mismo las pandemias como el ébola. No es difícil
concluir que este virus fue creado con ingeniería genética para reducir la
población del planeta, fue creado como un arma biológica para exterminar a la
humanidad. Cinco científicos que investigaban el origen artificial del ébola y
que iban a publicarlo en una revista científica, fueron asesinados en el avión
de pasajeros de Malaysian Airlines, derribado por los nazis del ejército de
Ucrania en la región independentista de Donetsk, con beneplácito de EE.UU y de
la OTAN… ESTO NO ES COINCIDENCIA, la pandemia que está matando a decenas de
personas al día en países como Liberia, Guinea, Sierra Leona, y ahora en EEUU y
en España, forma parte de un plan de matanza y genocidio ideado por las
inmundas élites que gobiernan en occidente.El ébola fue creado para ser un
arma biológica, para diezmar a la población, esta es la realidad escalofriante.
Incluso han manipulado genéticamente al virus con la rabia para posiblemente
materializar el apocalip-ISIS zombi… ¿por qué entonces dos muertas por el ébola
en Liberia se levantaron en su funeral espantando a la gente que se encontraba
ahí? La liberación deliberada y
encubierta de agentes patógenos es un acto de decadencia moral que forma parte
de nuestra era de la estupidez, cuando la ignorancia e inmundicia gobiernan este
mundo.