La situación geopolítica mundial va de mal en peor, la sociedad
humana ha perdido el control, nos estamos dirigiendo cada vez más a un
estallido social sin nombre, la demencia y la estupidez gobiernan el mundo, los
tiranos hablan de “libertad”, “derechos humanos” y “democracia” para justificar
las peores atrocidades de dominación e imperialismo.
Una vez que la guerra estalló
en Medio Oriente tomando como base histórica el imperialismo europeo, la creación del
Estado de Israel, el 11 de septiembre de 2001, esta zona del mundo ha sido elegida para que se inicie una
nueva guerra mundial que implicará el uso de armamento de asesinato masivo a
nivel mundial. La mayor parte de
acontecimientos históricos y sociopolíticos son consecuencias de procesos
sociales, en un proceso de degradación social en la que el “fin justifica
los medios”, las políticas de asesinato masivo ejecutadas no tienen oposición en la nueva era de la
hipocresía. ¡Cómo se puede permitir tanta degradación y depravación! La
guerra de Irak no ha terminado desde la invasión de EE.UU del 2003. Es mentira que el ejército de EE.UU se retiró de Irak en 2011 pues la inmensa
base militar construida en Bagdad hay todavía soldados del ejército
norteamericano que siguen recibiendo órdenes de matar a civiles, a todo lo que
se mueva incluyendo niños y mujeres como lo han venido haciendo los últimos 12 años, desatando un infierno sin nombre que ya
lleva más de dos millones de muertos en esta infernal guerra iraquí. Todo esto tendrá sus
consecuencias nefastas para toda la humanidad, si los más despiadados asesinos
de masas continúan como burócratas de un aparato estatal moralmente
descompuesto, entonces los violadores
del ejército norteamericano y sus mercenarios de la OTAN seguirán ingresando de ciudad en ciudad violando,
matando y encarcelando a personas, en un Estado de Terrorismo con terrorismo de
Estado para el despoblamiento del mundo, no solo en Irak, también en Afganistán, Libia, Siria, Yemen,
Somalia, Sudán, Congo, Ucrania etc. el infierno de la guerra está incendiando
al mundo, y la gran mayoría sigue en su burbuja personal masificado en un
sistema que necesita del asesinato masivo para mantenerse erguido.
Algo
sumamente preocupante es que el gobierno de EE.UU siga enviando armas,
financiamiento y entrenamiento a grupos terroristas como el Estado Islámico
para crear un Principado Sunita en la zona conquistada de Siria por este Terrorismo
salafista, takfir y saudita. La desintegración de Irak y de Siria como Estados-nación está siendo
ejecutada como política de Estado de países como EE.UU, Israel, Arabia Saudita,
Inglaterra, Turquía o Francia, que han servido de apoyo incondicional con armas
y entrenamiento, incluso con atención clínica (como lo hizo Israel al recibir
terroristas del Daesh en sus hospitales cercanos a los Altos del Golán de Siria) para que surja este Estado terrorista salafista-sunita, están destruyendo a los países árabes para beneficio de Israel. Bien lo
decía el rabino sionista Nir Ben Artzi: “Dios envió al Estado Islámico para destruir a los
enemigos de Israel”, lo que no
consideran los sionistas es que el monstruo que crearon para destruir Siria, Libia
e Irak, pronto se volverá contra su
creador, el monstruo se ha salido de control, por lo que es de esperar que
mega-atentados terroristas por todo Occidente sean atribuidas al Daesh, o
Estado Islámico. Para luego desatar una guerra ilimitada por todo el mundo;
Israel además aprovecha que la prensa occidental relacione a todo el mundo
musulmán con las atrocidades del Estado Islámico para así justificar las
matanzas en Palestina.
Pero un zombi robot de la sociedad de consumo, lavado el
cerebro hasta el tuétano por el veneno de la prensa corrupta, dirá que hay una
coalición de países liderada por EE.UU que está en este instante bombardeando
al Estado Islámico. Lo que no sabe el zombi robot es que los bombardeos no son
contra objetivos del Estado Islámico sino contra civiles iraquíes y sirios en
una política de limpieza étnica para la desintegración de estas naciones y la
creación de un Estado-Califato
artificial del Daesh o Estado Islámico. Otra cosa que no sabe el zombi robot,
es que hay documentación que prueba que EE.UU “por error” ha entregado decenas
de veces con helicópteros y paracaídas armamento pesado para el Daesh en su
misión de derrocar al gobierno de Bashar Al Assad e instaurar su anhelado Califato.
Está en los intereses de EE.UU y de Israel la creación de este Califato para
remodelar el mapa geopolítico de Medio Oriente. El Daesh ahora se ha tomado la
histórica ciudad de Palmira en Siria amenazando con destruir el Patrimonio de
la Humanidad, y desatando ya el infierno con la matanza de civiles, violación
en masa, expulsión de pueblos enteros de sus hogares, remodelando el mapa
geopolítico. Sin embargo, en Siria está la base militar rusa de Tartus, es más,
Siria forma parte del eje de Rusia-Irán-China, es por eso que la guerra civil siria
todavía no derroca a Bashar Al Assad en cuatro años de sangrienta contienda que
ha costado cientos de miles de muertos. El apoyo de Rusia es vital para el
régimen de Al Assad y su ejército, la caída de Damasco representaría un duro
golpe contra Rusia, y un paso más hacia el cataclismo de una guerra mundial. El
principado del Daesh que se quiere instaurar en Siria e Irak es también la peor
amenaza para el régimen chiita de Irán que ya ha enviado tropas para
enfrentarse al monstruo terrorista creado por EE.UU, Arabia Saudita e Israel.
La caída de Damasco obligaría a Irán a entrar en la guerra en Siria, así como
Arabia Saudita empezó a bombardear Yemen cuando se da la revolución chiita-houthi.
En realidad, estas diferencias religiosas y étnicas entre sunitas, salafistas,
takfires, alawitas, chiitas, es explotada por el imperialismo occidental para
provocar más conflicto con el objetivo de destruir los países árabes. Esa guerra
va más allá de un enfrentamiento entre chiitas y sunitas, es en verdad una
guerra imperialista impulsada por occidente con EE.UU en la cabeza, Europa como
aliado incondicional, e Israel como
principal beneficiado de una guerra genocida que está destruyendo a los pueblos
árabes.
La tensión geopolítica está llegando a niveles
insospechados, así mismo la tensión
social está a punto de estallar, y en el corazón mismo del imperio, en EE.UU,
una guerra civil interracial sin precedentes está cocinándose, mientras la Ley
Marcial está siendo preparada para fortalecer a un Estado Totalitario tiránico
jamás antes visto. Las políticas exteriores son reflejo de las políticas
interiores en EE.UU, si afuera está invadiendo, conspirando contra gobiernos en
todo el mundo, asesinando en masa en nombre de la “democracia”, dentro en
cambio, el gobierno está encarcelando a sus ciudadanos, EE.UU es el país que más
población carcelaria tiene en el mundo con más de dos millones de presos.
También hay un sistema de control y vigilancia masiva liderada por la Agencia
de Seguridad Nacional (NSA por sus
siglas en inglés) que puede monitorear, espiar, vigilar no solo a ciudadanos
estadounidenses sino también a ciudadanos de todo el mundo. Además, hay que denunciar
que el gobierno de EE.UU a través de la Agencia de Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) está construyendo
inmensas prisiones-campos de concentración para detener de forma masiva a los
descontentos con el régimen establecido y controlar el estallido social que se
avecina. La próxima Ley Marcial parece un hecho, las libertades fundamentales
están siendo pisoteadas día a día, e incluso un enfrentamiento interracial está
ya ocurriendo en EE.UU con la cantidad de asesinatos de afrodescendientes y
latinoamericanos por parte de policías que luego son declarados fuera de culpa
por el sistema de justicia, las protestas masivas que exigen justicia en un
sistema judicial repodrido y de por sí injusto se están convirtiendo en
movimientos armados que pueden ser un gran dolor de cabeza para el gobierno
federal. Organizaciones masónicas como
el Ku Klux Klan o la Nación Islámica agitan a las masas para el enfrentamiento interracial,
el gobierno de EE.UU está preparando un estado de shock para su pueblo y
justificar medidas hiper draconianas que dirán adiós a las libertades
fundamentales. Mientras el mundo se acerca inexorablemente a una guerra nuclear
que despoblará al mundo para la consecución de la gobernanza mundial en un
mundo infernal post-apocalíptico.