Thursday, September 23, 2010

UNA LIMPIA DE LOS SÍMBOLOS



Una de las maneras de conocer la realidad, es saber interpretar. La realidad se presenta con símbolos, con signos, con emblemas, con formas sujetas a la interpretación, cuyo proceso de integración a lo real implica un adherirse a la realidad. Las cosas forman símbolos, la realidad se presenta como un símbolo para interpretar.

Ahora, ¿cómo determinar la importancia de los símbolos?, ¿cómo podemos identificar y analizar al simbolismo de la realidad? ¿Con qué marco de referencia vamos a hacer nuestras interpretaciones? ¿Cuál es la interpretación más adecuada para conocer la realidad?... Eso es lo más importante, porque en el infinito mundo de posibilidades, hay un infinito número de interpretaciones de la realidad, ¿cual es la interpretación del símbolo que más se acerca a la realidad?

La problemática es bastante compleja, porque cada cual puede tener su propia interpretación de los símbolos que se nos presentan en la realidad. Para ello lo más significativo y honesto es interpretar al símbolo, tomando la vida de uno mismo como un símbolo, porque al formar parte de la realidad, somos un símbolo más insertado en el símbolo de la totalidad. La propia interpretación de la realidad está determinada por la simbología cultural, de allí que lo más importante es hacer una hermenéutica de los símbolos con una visión simbólica de la realidad.

Ahora bien, para acercarnos a la solución de la problemática sobre la complejidad de la símbolos, una interpretación sincera y honesta, que venga de la originalidad de cada uno, es necesaria. Uno sabe que la “verdad” es un símbolo, y que detrás del símbolo está escondida una “verdad”, y que la realidad misma está sometida a la interpretación, a la simbología. De tal forma que nadie tiene la verdad absoluta porque no existe tal cosa en el mundo infinito de la interpretación, una verdad única es matar al misterio de lo Desconocido, base del misterio de los símbolos y los mitos. Una sola forma de interpretar a los mitos, por ejemplo, que son símbolos, es una forma de castrar al pensamiento creativo de la infinita posibilidad. Cada símbolo, cada mito, puede tener distintas interpretaciones.

La manera como interpretar está sujeta a la manipulación que la misma sociedad engendra, por eso la mayor parte de símbolos han sido deformados de su significado real para moldear la psique del borrego humano para que no pueda interpretar bien los símbolos, por ello es menester hacer un exorcismo y limpia de los símbolos para poder encontrar su verdadero significado.

Dentro de la ingeniería social, el poder usa símbolos para moldear a la pisque colectiva, por eso existen banderas, escudos, himnos, para el lavado cerebral de masas. De hecho, toda la parafernalia consumista del demencial markenting actual de la sociedad es un bombardeo de “sigiles” y “símbolos” que dañan a la mente colectiva, llevándola a la enajenación y a la perdición. Una especie de magia psíquica para hacer daño. Todos los gobiernos tienen sus símbolos para el lavado cerebral, y tergiversan su significado para manipular la interpretación de la realidad del humano. Tomemos algunos ejemplos, y de paso, vamos haciendo la limpia de los símbolos.


1) Estrella Hexagrama:



El símbolo del judaísmo es la estrella de seis puntas, el hexagrama, o los dos triángulos interpuestos. Este símbolo no es exclusivo de los judíos, pues hace miles de años, los pueblos ya usaban el hexagrama como “mandala”, mucho más anteriores a la existencia misma del judaísmo. Fue lamentable que esta secta del judaísmo se convirtiera en una religión y utilice este símbolo como estandarte, porque fue deformando su verdadero significado. Como producto de los primeros monoteísmos dogmáticos se confundió a este símbolo, se deformó su verdadero significado y se lo interpretó como la alianza del “Dios” de los judíos con la Tierra. Mientras que para los otros pueblos los dos triángulos interpuestos son otro psicograma de la superación de la dualidad, como un Yin-Yang del tao, la unión de los opuestos, la coincidencia opositora, el anhelo último de la alquimia, la unión del cielo con la tierra, la encarnación terrenal de la divinidad o la experiencia cumbre.



Esto nada tiene que ver con la creencia judía de la servidumbre hacia un Dios castigador con la supuesta “alianza” que hacen los judíos como el pueblo “escogido”. El efecto que produce relacionar el hexagrama con el judaísmo es negativo, porque no solo los judíos monoteístas pueden experimentar la divinidad en vida propia, y además la experiencia de la divinidad no tiene por qué ser exclusivo de los judíos y ser relacionado con el Dios único del monoteísmo. Esto nos aleja de nuestro potencial de mejor interpretación del símbolo. Si nunca dejamos de relacionar el hexagrama con “la Estrella de David”, jamás vamos a llegar a comprender el verdadero significado de los dos triángulos interpuestos. Dentro del conocimiento alquímico es la unión de los opuestos, los judíos usan al hexagrama como magia psico-social usada por el sistema establecido para el Lavado Cerebral, hacer perder el verdadero significado del símbolo, objetivo último del daño cerebral psico-social. Es lamentable que el hexagrama sea relacionado hasta con el genocida Estado de Israel por la inmensa carga negativa psíquica que daña la interpretación del símbolo. La mala interpretación del símbolo ha llevado realmente a la ruina a la especie humana.

2) Swástica :





La swástica es un símbolo muchísimo más antiguo que el nacimiento del nazismo. Este símbolo tampoco es exclusivo de los nazis, pues hace miles de años, los pueblos ya usaban la swástica como “mandala”. Fue lamentable que la secta del nazismo utilice este símbolo como estandarte, porque fue deformando su verdadero significado. La swástica, desde la antigüedad, era otro símbolo de la experiencia de la divinidad, no tenía nada que ver con el racismo y la sed de sangre. El centro de la swástica representa a la persona que está experimentando la divinidad, ya que todo gira a su alrededor, es el “centro del mundo”. Por eso lo monasterios budistas del Tibet y muchos otros monumentos de la India védica, tienen una representación de la swástica como la experiencia misma de la “iluminación”. Dentro del conocimiento alquímico es la rueda que siempre gira, el centro es lo imperturbable, lo sólido, es lo quieto del movimiento. Fue lamentable que el movimiento político esotérico de los nazis usaron este símbolo como magia psico-social para el lavado cerebral de masas e ingeniería social. Esto nos aleja de nuestro verdadero potencial de interpretación del símbolo. La swástica es un símbolo, mandala antiguo que merece nuestra meditación, y no relacionarlo con los nazis, sino en lo que verdaderamente significa, la plenitud, el éxtasis de la experiencia de lo divino.


3) El ojo dentro del triángulo :



El símbolo de la pirámide y el ojo es mucho más antiguo que la existencia de la francmasonería y de los Illuminati de Baviera. Este símbolo no es exclusivo de estas sociedades secretas, pues hace millones de años, los pueblos lo usaban como un “mandala”. Para muchos pueblos del mundo el ojo dentro del triángulo simboliza la apertura del “tercer ojo”, es decir la experiencia de lo divino y del éxtasis. Aquí tenemos otro ejemplo claro de cómo los símbolos han sido manipulados y alejados de su verdadero significado para deformar la realidad. Si el ojo dentro de un triángulo simboliza la experiencia con lo divino, ¿por qué lo encontrarnos en el billete de un dólar? Pues para insertar una carga hiper-negativa psico-social al símbolo, para alejar al ser humano del verdadero significado del símbolo de la “iluminación”, la plenitud, la trascendencia. Siendo el dinero la esencia misma de toda la abominación del sistema establecido, la pirámide y el ojo, pierde su carga simbólica hacia lo más negativo, magia para hacer daño a la mente social, y a la sana interpretación de los símbolos. Para la francmasonería y los Illuminati es el símbolo de su dios, satán, bafomet, el diablo, dando incluso una carga psico-socal muchísimo más negativa al símbolo del ojo en el triángulo, porque frente a este símbolo se realizan los rituales más atroces.

Para la sabiduría ancestral, la experiencia de lo divino es fundirse con el infinito de la totalidad, es vivir la experiencia de más allá del infinito, la extensión-implosión, ser uno-todo con todas las cosas, sentir la experiencia real de la cumbre y del éxtasis. Tal es el verdadero significado del ojo dentro del triángulo. Lamentablemente, mientras sigamos relacionando a este símbolo con los Illuminati, los francmasones, Rosacruces, templarios, jamás vamos a tener una interpretación fidedigna de lo que significa.

Dentro de la carga negativa del símbolo, el ojo que todo lo ve sería el gran arquitecto del universo de la francmasonería, su dios único del cual también como los judíos se creen elegidos. También es lamentable que el ojo dentro del triángulo lo llamen “el ojo que todo lo ve” porque este último representa hoy en día al super-gobierno mundial de la hiper-vigilancia, el control total de la población, cámaras por todas partes, face Book, big broder, etc. simboliza a la red de espionaje más grande del mundo, el Ojo que todo lo vigila y que todo lo sabe del Totalitario y dictatorial nuevo orden mundial imperial que preparan la masonería en su mesianismo apocalíptico. Esto no tiene nada que ver con la "iluminación"...

La tergiversación y la mala interpretación de los símbolos está llevando a la humanidad hacia el desastre, por ello es necesario una verdadera limpia de nuestros propios órganos de interpretación, estar con la mente pura y atenta, nuestra consciencia pura y limpia, alerta para recibir la mejor interpretación, la más fidedigna y honesta de los símbolos.